El crecimiento y desarrollo cada vez mayor del sector ecuestre exige de la especialización del personal que trabaja en instalaciones hípicas. Este no solo debe tener los conocimientos básicos para el desempeño de sus funciones específicas, sino que deben conocer ampliamente la anatomía, fisiología, psicología, nutrición, manejo y cuidados básicos de los caballos. ¿Te apasiona el mundo de los caballos? Ahora puedes convertir tu pasión en tu forma de vida.
El cuidador de caballos está capacitado para conducir y manejar caballos de forma rutinaria, para reconocer las enfermedades y lesiones más frecuentes del caballo, así como la aplicación de medidas profilácticas y preventivas y/o curativas adecuadas en cada momento.
También puede realizar otras funciones de organización y administración en centros de asistencia y servicios especializados para el sector ecuestre.