Al inicio del siglo XX el cáncer era casi siempre mortal, no había tratamientos efectivos y sólo se contemplaban la paliación. Actualmente la mayoría de los cánceres son controlables y hasta curables, cuando se detectan de manera temprana.
Por ello se pretende con este curso capacitar a los Diplomados en Enfermería a ayudar al enfermo en cada uno de los ámbitos donde éste lo necesite, adquiriendo las destrezas necesarias para hacerlo de la mejor manera posible. Estará perfectamente capacitado para resolver cualquier incidencia que para el enfermo pueda suponer una pérdida de calidad de vida.